sábado, 30 de enero de 2010

Carta de una madre biológica a una madre adoptiva


La memoria es obligatoria para alimentar nuestra propia vida en aspectos particularmente íntimos, la dignidad personal no puede pasar por obviar actos vergonzantes, un acto vergonzante es ignorar, obstaculizar y omitir el DERECHO que tenemos a saber.

La elección hecha en un momento determinado de nuestra vida, sea forzada o no, obligada o no, consciente o no repercute directamente en nuestros hijos, excluyéndolos de su patrimonio emocional y físico porque no tienen libertad de elección en los afectos o desafectos, no tienen pasado, solo parten de una premisa incierta que muchísimas veces puede repercutir en algunos casos negativamente en su futuro.

El nacimiento es involuntario, ser madre es voluntario no obligatorio, ser madre es estar, querer, cuidar, mimar y mantener ese vínculo que nos hace crecer hacia el futuro, hay madres como yo y muchas otras que vieron torcida su voluntad por interferencias ajenas, lucharon y perdieron, entonces llegaste tu, madre de mi hijo y de muchos otros hijos, de la manera que llegaste es lo de menos en este momento, han pasado tantos años que lo mismo somos abuelas las dos, tú lo sabes y disfrutas de ello, yo solo puedo imaginármelo y seguir con mi pena, mis lágrimas y mi dolor, te agradezco infinito que hayas sido su madre, lo pariste en tu alma, gracias por cuidar de él.

No pretendo quitarte a tu hijo, ni quitarte su amor, ni desplazarte, ni meterme en su vida, tampoco pretendo adquirir derechos que me quitaron las personas y la sociedad, solo quiero que sepa que lo quería más que a mi vida, que fue deseado, amado, que sepa que no lo rechacé ni lo regalé, que no lo aparté y que su ausencia dejó un vacío insoportable, quiero que sepa de donde viene, cual es su bagaje biológico con sus pros y sus contras, solo quiero que sepa que nunca me he olvidado de él y que jamás lo haré.

Madre de mi hijo, ¿has pensado alguna vez si se siente inseguro respecto a las grandes incógnitas de su vida? No sé si te habrá pasado por la mente que a lo mejor tu hijo intuye que es adoptado o lo sabe por terceros y no se atreve a decírtelo, puede que ya lo sepa porque se lo hayas dicho y no se atreve a plantearte que quiere saber quién es su madre biológica para no herirte y que no pienses que no te quiere, puede que se pregunte si tiene hermanos, puede que haya tenido que soportar motes o bromas crueles en el colegio o con sus amistades sobre su origen y no te lo haya dicho para no preocuparte, puede que haya necesitado o necesite sus antecedentes médicos familiares, para él para sus hijos.

Madre de mi hijo, si le has dicho que es adoptado ¿Le has contado cómo fue y le has ayudado con sus inquietudes, zozobras e inseguridades? ¿Le has ofrecido la posibilidad de ayudarlo a saber? ¿Le has dicho algo sobre mí?Madre de mi hijo, si no le has dicho que es adoptado ¿Por qué? ¿Esperas que lo descubra cuando ya no puedan ser contestadas sus preguntas? ¿Crees que te querrá menos? ¿Te avergüenza acaso? ¿Qué motiva que lo mantengas en la ignorancia de su propia vida?

Si lo adoptaste a través de la Sra. Mercedes de Gras en Bilbao, España, en los años 70 a 80 te brindo la oportunidad de ser valiente, de quererlo un poco más si cabe, soy su madre, necesito saber si vive, saber que es feliz, necesito que sepa que lo he querido siempre, que lo he buscado siempre, escríbeme por favor, deja que le aporte la parte de la identidad que le falta, déjame hacerle el único regalo que tengo para él.

Gracias por leerme. Gotasdelluvia3000@yahoo.es

viernes, 1 de enero de 2010

QUÉ ES EL PERDÓN


Perdonar es quebrar la deuda. Deuda que se contrajo cuando alguien fue injusto conmigo. Sus acciones quebraron mi corazón posponiéndome, menospreciándome, acusándome. Por culpa de otro me siento más pobre, más triste, menos yo. El hecho de que ese peso destructivo siga influyendo aún hoy en mi vida con su carga de desvalorización y de freno en mi creatividad ya no lo puedo atribuir a la culpabilidad de otro. El otro inició ese proceso. Pero está siempre en mis manos iniciar un nuevo proceso para quebrar esa deuda. Ello se da por una decisión, una actitud, un proceso y una forma de vida, que buscan llegar a ese objetivo de anular la deuda. La ofensa, la herida está. He vivido atado a ella por un tiempo. He decidido cortar con esa atadura y vivir de aquí en más con una actitud de vida que tiene como perspectiva, como luz, una comprensión más profunda de las cosas, nacida del amor. Perdonamos en la medida en que amamos. Muchos animales se alimentan de los desechos y de los excrementos; otros, como la abeja, de lo hermoso y dulce. Cada persona puede elegir cómo y de qué alimentará su corazón.
(Cosp, Antonio; La vida es una fiesta)